Espinacas

 

Las espinacas se han convertido en un alimento de alto valor nutricional, tanto para adultos como para jóvenes. El nombre de espinaca (Spinacea oleracea L.) se deriva del termino spina o espina, debido a que los frutos de esta planta cuando están en su punto de maduración se presentan armados de espinas. Todos sabemos que el endeble Popeye necesitaba una lata de espinacas cada vez que quería defender a Olivia del acoso de Brutus. Las espinacas poseen estupendas propiedades nutritivas, ya que no sólo aporta fuerza y energía, sino que también es ligera y pobre es grasa.

 

El origen silvestre de esta verdura es desconocido. Sin embargo, numerosos autores ubican los primeros cultivos de espinaca en la zona del Cáucaso y parte de Persia. Llegaron a Europa hace mil años, gracias a la invasión árabe, siendo introducidas por los musulmanes en el siglo XI en la dieta medieval de la península Ibérica. En la década de 1920 la espinaca logra popularidad en América, momento en que se conocieron sus propiedades nutricionales, aunque en dicho país habían sido introducidas con anterioridad.

Actualmente las espinacas forman parte de la dieta de todo el mundo y se cultiva en todos los países del planeta, siendo Estados Unidos, Italia, Francia, Alemania, Holanda y Japón los mayores productores.

Características de las espinacas

La espinaca es una planta anual, con hoja de color verde oscuro. Inicialmente la planta tiene un tallo con forma de disco, del que emergen hojas pecioladas con limbo triangular. Se aprovecha la hoja. Su tallo es erecto de 30 cm a 1 metro de longitud en el que se sitúan las flores. Cuenta con una raíz pivotante, poco ramificada y de desarrollo radicular superficial. Sus hojas son caulíferas, más o menos alternas y pecioladas, de forma y consistencia muy variables, en función de la variedad, de color verde oscuro. Las flores masculinas son de color verde y se agrupan en las espigas terminales, mientras que las femeninas se reúnen en glomérulos.

 

Variedades cultivadas de las espinacas

Las espinacas se clasifican en función de la textura y color de sus hojas, de la época del año en que se siembran o por la variedad de su hoja.

● Según la variedad de hoja:

- De hoja rizada: adaptadas para crecer en invierno, muy resistentes al transporte. Se suelen comercializar frescas.

- De hoja lisa: se comercializan enlatadas o congeladas y su consumo está más extendido que las anteriores.

● Según época del año en que se encuentran:

- Variedad de verano: Son las más empleadas. Su siembra es en primavera y verano. Podemos incluir la "Rey de Dinamarca" y la "Cleanleaf".

- Variedad de invierno: sus hojas son triangulares, más gruesas y resistentes que las de verano. Podemos incluir la "Broad-Leaved Princkly", "Greenmarket" y la "Monnopa".

● Según color y textura de sus hojas:

- De color verde oscuro muy brillante podemos incluir la espinaca "Lagos".

- De hojas redondas y color verde muy oscuro, "la Martine".

- De hojas de color verde brillante y gruesas, la "Taunus".

- De hojas lisas de color verde, la "Viroflay".

 

Valor nutricional de las espinacas. Ventajas

Las espinacas están compuestas en su mayoría por agua (92%).

Su contenido en grasa (0,3-0,65 g por 100 g de parte comestible) e hidratos de carbono (3,4 g por 100 g de parte comestible) es muy bajo.

En cuanto a su contenido en proteína, tampoco es muy alto (2,5 g por 100 g de parte comestible), pero pese a eso la espinaca es uno de los vegetales más rico en este nutriente.

Como consecuencia de un bajo aporte en grasa e hidratos de carbono y de rica en agua, las espinacas son un alimento con un bajo aporte calórico (tan sólo 22 Kcal por 100 g de parte comestible).

El contenido en fibra, al igual que ocurre con la mayoría de las verduras, es considerable, lo que las hace muy beneficiosas para la salud. Aportan 1,8 g por 100 g de parte comestible.

Las espinacas presentan cantidades elevadas de provitamina A y de vitaminas C y E, todas ellas con efecto antioxidante. Es fuente de vitaminas del grupo B como folatos, B2, B6 y, en menor cantidad de B3 y B1.

En cuanto al aporte mineral, las espinacas son ricas en sodio, potasio, magnesio, calcio y hierro (es hierro no hemo, el cual se absorbe con mayor dificultad que la forma hemo, que es el que contienen la carne y demás productos animales).

Su consumo está altamente recomendando en dietas de todo tipo, siendo uno de los alimentos de mayor aporte nutricional presentes en dichas dietas.

También es fuente de buenas cantidades de yodo y fósforo.

Además, las espinacas son ricas en otros compuestos como glutation, ácido ferúlico, ácido cafeico, ácido beta-cumarico, carotenoides como la luteína y la zeaxantina, aminas como la histamina y ácido oxálico.